Brazos espirales brillantes y estrellados rodean un centro galáctico activo en esta nueva imagen de la galaxia NGC 4951 del Telescopio Espacial Hubble de la NASA/ESA.
Ubicada en la constelación de Virgo, NGC 4951 se encuentra aproximadamente a 50 millones de años luz de la Tierra. Está clasificada como galaxia Seyfert, lo que significa que es un tipo de galaxia extremadamente energética con un núcleo galáctico activo (AGN). Sin embargo, las galaxias Seyfert se diferencian de otros tipos de AGN porque la propia galaxia todavía se puede ver claramente: los diferentes tipos de AGN son tan brillantes que es casi imposible observar la galaxia real en la que residen.
Los AGN como NGC 4951 funcionan con agujeros negros supermasivos. A medida que la materia gira hacia el agujero negro, genera radiación en todo el espectro electromagnético, lo que hace que el AGN brille intensamente, informa la NASA.
Hubble ayudó a demostrar que existen agujeros negros supermasivos en el núcleo de casi todas las galaxias de nuestro universo. Antes de que el telescopio se lanzara a la órbita terrestre baja en 1990, los astrónomos sólo teorizaban sobre su existencia. La misión verificó su existencia observando los efectos innegables de los agujeros negros, como chorros de material expulsados de los agujeros negros y discos de gas y polvo que giran alrededor de esos agujeros negros a velocidades muy altas.
Estas observaciones de NGC 4951 se tomaron para proporcionar datos valiosos para los astrónomos que estudian cómo evolucionan las galaxias, con especial atención en el proceso de formación de estrellas.
Hubble recopiló esta información, que se combina con observaciones con el Telescopio Espacial James Webb (JWST) para respaldar un programa del Tesoro del JWST. Esta clase de programa recopila observaciones que se centran en el potencial de resolver múltiples problemas científicos con un conjunto de datos único y coherente y permiten una variedad de investigaciones científicas convincentes.
Fuente: Ciencia Plus