El joven, que pertenecía a una tribu sin casi ningún conocimiento del mundo exterior, se acercó a una aldea en Brasil.
Es difícil imaginar hoy en día que aún existan comunidades tan aisladas del mundo exterior que desconocen casi todo lo que ocurre más allá de sus fronteras.
Sin embargo, aún se pueden encontrar comunidades de este tipo en las regiones remotas de la selva amazónica.
Justo esta semana, los habitantes de Bela Rosa, Brasil, se sorprendieron cuando un hombre de una de estas tribus apareció repentinamente en su comunidad al anochecer y comenzó a hablarles en un idioma desconocido.
El hombre era bastante joven y blandía dos palos de madera con los que hacía gestos para indicar que buscaba fuego.
Uno de los lugareños intentó, sin éxito, demostrar el funcionamiento de un encendedor.
Al llegar los agentes, escoltaron al hombre a un centro cercano para una evaluación médica.
Se entiende que se intentará contactar con la tribu juma, cuya población original ahora consta de solo tres mujeres, para que intente comunicarse con él.
Actualmente no se sabe con certeza qué tan lejos llegó ni cuántos miembros de su tribu permanecen en la selva.