El manuscrito Voynich es un misterioso libro ilustrado de contenidos desconocidos, escrito hace alrededor de 500 años por un autor anónimo en un alfabeto no identificado y un idioma incomprensible, el denominado voynichés.
El manuscrito Voynich es un misterioso libro ilustrado de contenidos desconocidos, escrito hace alrededor de 500 años por un autor anónimo en un alfabeto no identificado y un idioma incomprensible, el denominado voynichés. A lo largo de su existencia constatada, el manuscrito ha sido objeto de intensos estudios por numerosos criptógrafos profesionales y amateurs, incluyendo destacados especialistas estadounidenses y británicos en descifrados de la Segunda Guerra Mundial. Ninguno consiguió descifrar una sola palabra. Esta seguidilla de fracasos ha convertido al manuscrito en el Santo Grial de la criptografía histórica; pero ha alimentado también la teoría de que el libro no es más que un elaborado engaño, una secuencia de símbolos al azar sin sentido alguno. El libro fue nombrado por el especialista en libros antiguos Wilfrid M. Voynich, quien lo adquirió en 1912. Actualmente es el ítem MS 408 en la Biblioteca Beinecke de libros raros y manuscritos de la Universidad de Yale. El libro posee alrededor de 240 páginas de pergamino, con vacíos en la numeración de las mismas (la cual es aparentemente posterior al texto, quizá del siglo XVI), lo que sugiere que varias páginas se encontraban ya extraviadas al momento de su compra por Voynich.
Para evitar extravíos posteriores el padre Petersen lo fotocopió en 1931, repartiendo dichas copias entre varios investigadores interesados en su estudio e intento de traducción. Se utilizó una pluma para escribir el texto y delinear las figuras, y pintura de colores (algo escabrosamente) para las figuras; según se puede apreciar, el texto es posterior a las figuras, ya que en numerosas ocasiones el texto aparece tocando el borde de las imágenes, algo que no ocurriría si éstas hubiesen sido añadidas a posteriori. Las ilustraciones del manuscrito no aclaran los contenidos del texto, pero denotan que el libro consta de seis “secciones”, con diferente materia y estilo. Exceptuando la última sección, que contiene únicamente texto, casi la totalidad de las páginas contienen al menos una ilustración. Las secciones y sus nombres convencionales son:
Herbario: cada página muestra una planta (en ocasiones dos) y algunos párrafos de texto, un formato típico de herbarios europeos de la época. Algunas partes de estas ilustraciones son copias en mayor escala y detalle de bocetos vistos en la sección farmacéutica (debajo).
Astronómica: Contiene diagramas circulares, algunos de ellos con soles, lunas y estrellas, lo que sugiere que trata de astronomía o astrología. Una serie de 12 diagramas muestra símbolos convencionales para constelaciones zodiacales (dos peces para Piscis, un toro para Tauro, un soldado con un arco para Sagitario, etc.). Cada símbolo es rodeado por exactamente 30 figuras de mujeres en miniatura, la mayoría de ellas desnudas, cada una sosteniendo una estrella. Las dos últimas páginas de esta sección (Acuario y Capricornio) fueron extraviadas, mientras que Aries y Tauro están separados en cuatro diagramas con 15 estrellas cada uno. Algunos de estos diagramas se encuentran en páginas desplegables.
Biológica: Un texto denso y continuo con figuras de pequeñas mujeres desnudas tomando baños en balnearios públicos o tinas interconectadas por una elaborada red de tuberías, algunas de ellas claramente en forma de órganos del cuerpo. Algunas de las mujeres llevan coronas.
Cosmológica: Más diagramas circulares, pero de naturaleza desconocida. Esta sección también posee páginas desplegables, una de ellas de seis páginas de largo, que contiene una especie de mapa o diagrama con seis “islas” conectadas por calzadas, castillos y posiblemente un volcán.
Farmacéutica: Varios dibujos con leyendas de partes de plantas aisladas (raíces, hojas, etc.); objetos similares a jarras farmacéuticas (albarelos) a lo largo de los márgenes y algunos párrafos de texto.
Recetas: Muchos párrafos cortos, cada uno marcado con una “viñeta” en forma de flor (o estrella) que hacen pensar en una serie de órdenes, pasos o instrucciones para elaborar algo (presumiblemente un producto químico o alquímico).
Conclusiones
Las extrañas características del texto del manuscrito (tales como las palabras duplicadas o triplicadas) y el contenido sospechoso de sus ilustraciones (tales como las plantas quiméricas) han llevado a muchos a pensar que el manuscrito es en realidad un engaño.
En 2003 el especialista en computación doctor Gordon Rugg mostró que se podía reproducir texto con características similares a las del que contiene el manuscrito, mediante el uso de una tabla con prefijos, raíces y sufijos, que habrían sido seleccionados y combinados por medio de una plantilla de papel perforado. Este mecanismo, conocido como rejilla de Cardano, se inventó hacia 1550 como herramienta criptográfica. Sin embargo, los pseudo textos generados en los experimentos de Gordon Rugg no tienen las mismas palabras y frecuencias que el manuscrito Voynich, y su parecido al ‘’Voynichés’ es sólo visual, no cuantitativo. Puesto que también se puede producir un galimatías aleatorio que se parezca al español (o a cualquier otra lengua) en una medida similar, estos experimentos no son convincentes ni demuestran nada.
Fuente: http://es.wikipedia.org
Enigma 900 /Elías Marín