El drástico CAMBIO del CAMPO MAGNÉTICO de la TIERRA

El campo magnético de la Tierra desempeña un papel crucial en la protección de la vida en nuestro planeta, actuando como un escudo invisible frente a la radiación peligrosa y la actividad geomagnética. Sin embargo, este defensor incansable no es estático: se mueve, evoluciona y, en algún momento, puede incluso invertirse.
El campo magnético terrestre se origina en el núcleo externo de la Tierra, compuesto por hierro líquido a unos 3000 kilómetros de profundidad. Las corrientes eléctricas generadas por el movimiento del hierro líquido en esta región conducen a la formación del campo magnético, un fenómeno esencial generado por cargas eléctricas en movimiento.
Las evidencias iniciales del campo magnético terrestre, basadas en minerales magnéticos en rocas, datan de unos 3500 millones de años. Sin embargo, se han encontrado circones de zircón con una antigüedad de hasta 4200 millones de años, sugiriendo una posible existencia aún más antigua del campo magnético terrestre.
El campo magnético terrestre forma una burbuja protectora llamada magnetosfera sobre la capa más externa de la atmósfera, la ionósfera. Sin este escudo, la radiación cósmica y el viento solar afectarían negativamente la Tierra, causando daños a la vida y al medio ambiente.
Aunque la magnetósfera protege contra eventos cósmicos, como las eyecciones de masa coronal, pueden desencadenar tormentas geomagnéticas y afectar las comunicaciones por satélite y el funcionamiento del GPS. Las consecuencias de estos eventos no solo se limitan al espacio, sino que también amenazan nuestras infraestructuras eléctricas y de comunicación en la Tierra.
El campo magnético terrestre no es estable. Cambia con el tiempo, tanto en intensidad como en dirección.
El campo magnético terrestre experimenta inversiones periódicas, alternando entre los polos magnéticos norte y sur. Estos cambios, que ocurren cada 100 000 a 1 000 000 de años, representan una inversión completa del campo. La última inversión tuvo lugar hace aproximadamente 780 000 años.


Los científicos no están seguros de la causa de la disminución de la intensidad del campo magnético terrestre. Una posibilidad es que sea causada por el cambio climático. El cambio climático está provocando el calentamiento del océano, que podría estar afectando el movimiento del hierro líquido en el núcleo externo.

Fuente: METEORED

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

You May Also Like