Agencias de NoticiasLa NASA ha asignado la tarea de desmantelar la icónica plataforma orbital nada menos que a Elon Musk.
Resulta difícil creer que hayan pasado 25 años desde que se lanzó el primer módulo de la Estación Espacial Internacional.
La Estación Espacial Internacional, un faro brillante de esperanza, avance tecnológico y cooperación internacional, ha sido un elemento fijo de las ambiciones extraterrestres de la humanidad durante casi tres décadas.
Sin embargo, como todas las cosas buenas, la estación espacial pronto llegará a su fin.
La NASA ha seleccionado esta semana a la empresa SpaceX de Elon Musk para desarrollar un nuevo tipo de vehículo “remolcador” con un coste de 843 millones de dólares que se utilizará para arrastrar toda la estación espacial de vuelta a tierra firme.
Este “desmantelamiento” de la estación se llevará a cabo en 2030.
“La selección de un vehículo de desórbita estadounidense para la Estación Espacial Internacional (ISS) ayudará a la NASA y a sus socios internacionales a garantizar una transición segura y responsable en la órbita baja terrestre al final de las operaciones de la estación”, dijo Ken Bowersox, director de operaciones espaciales de la NASA.
“Esta decisión también respalda los planes de la NASA para futuros destinos comerciales y permite el uso continuo del espacio cerca de la Tierra”.
Para cuando la ISS desaparezca, es probable que las empresas privadas estén en proceso de lanzar sus propias estaciones espaciales comerciales a la órbita de la Tierra.
La NASA y sus socios también se pondrán en marcha para construir una nueva estación espacial en órbita alrededor de la Luna como parte de los esfuerzos para permitir la exploración espacial tripulada de la superficie lunar y más allá.
Rafael Oseguera
Elias Marin
Jorge P. Luevano
Enigma 900
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