El núcleo de la Tierra no sólo se ha RALENTIZADO, también ha INVERTIDO su DIRECCIÓN 

Los científicos confirmaron que el núcleo de la Tierra se ha comportado de forma bastante inesperada. 

Situado a más de 3.000 millas bajo la superficie del planeta, el núcleo interno de la Tierra; una enorme bola giratoria de metal sólido compuesta principalmente de hierro y níquel. La cual ha sido durante mucho tiempo un enigma debido a su ubicación inaccesible y las dificultades inherentes a la obtención de datos precisos. 
 
Gran parte de lo que hemos aprendido sobre el núcleo interno proviene del análisis de las ondas producidas por grandes terremotos, y las diferencias entre ondas de intensidad comparable que pasan a través del núcleo en diferentes momentos proporcionan pistas sobre la posición del núcleo y la velocidad de rotación. 
 
El año pasado, los científicos idearon un nuevo modelo que sugiere que el núcleo interno de la Tierra había girado anteriormente más rápido que el propio planeta antes de comenzar a desacelerarse nuevamente. De hecho, se desaceleró hasta tal punto que desde entonces ha comenzado a girar en la dirección opuesta. 
 
Ahora, un equipo independiente de científicos ha confirmado efectivamente que esto es efectivamente así al estudiar las ondas sísmicas producidas por 121 terremotos entre 1991 y 2023. 

Incluso analizaron las ondas de choque producidas por las pruebas de armas nucleares soviéticas en la década de 1970. 
 
“Hemos estado discutiendo sobre esto durante 20 años, y creo que esto lo dice todo”, dijo el coautor del estudio, el Dr. John Vidale, de la Facultad de Letras, Artes y Ciencias Dornsife de la Universidad del Sur de California. 
 
“Creo que hemos terminado el debate sobre si el núcleo interno se mueve y cuál ha sido su patrón durante las últimas dos décadas”. 
 
Si bien la idea de que el núcleo de la Tierra ahora está girando en sentido inverso puede ser desconcertante, vale la pena recordar que es probable que el núcleo haya estado cambiando de dirección y velocidad de esta manera durante miles de millones de años. 
 
En otras palabras, no es nada de lo que preocuparse.