AVANCES CIENTÍFICOS recientes para comprender CÓMO y POR QUÉ SOÑAMOS 

Experimentamos sueños de manera regular, pero todavía hay mucho sobre ellos que no sabemos. 

Anthony Bloxham: A lo largo de la historia de la humanidad, la gente se ha preguntado si los sueños tienen un propósito. Los científicos modernos también están fascinados con esta pregunta. 
 
Durante mucho tiempo, la ciencia de los sueños ha oscilado entre la investigación marginal y la corriente principal. Pero los diseños de estudios creativos y las nuevas tecnologías la están transformando en un nicho de investigación apasionante y serio. 
 
A continuación, se presentan cuatro avances recientes que pueden allanar el camino para una mayor comprensión de los sueños. 
 
Sueños lúcidos 
 
En 2021, un estudio internacional demostró que era posible la comunicación bidireccional entre un soñador lúcido y un investigador en el laboratorio. En 2024, otro estudio se basó en esto al entrenar a soñadores lúcidos para controlar un automóvil virtual desde sus sueños. 
 
Los 12 soñadores del experimento realizaron ligeras contracciones musculares, que enviaron una señal a un ordenador para hacer que el vehículo virtual avanzara o girara. Se enviaron señales de vuelta al soñador para informarle de los obstáculos que debía intentar evitar. Algunos podían mover el automóvil bien, pero otros, por mucho que lo intentaran, no podían. 
 
Aunque es fascinante, todavía se desconoce cómo se podría utilizar esta tecnología en la vida cotidiana. Y la pequeña muestra de este estudio, en parte debido a la rareza de los soñadores lúcidos expertos, limita las conclusiones que podemos sacar de él. Pero los hallazgos sugieren que puede ser posible (al menos con la práctica) que algunas personas tomen decisiones desde dentro de un sueño y las comuniquen al mundo exterior.  
 
¿Por qué soñamos? 
 
Mark Blagrove, investigador del sueño y los sueños de la Universidad de Swansea, cree que los sueños fueron pensados para ser compartidos socialmente y evolucionaron en los humanos para mejorar la inteligencia emocional y la empatía. 
 
Desde 2016, Blagrove ha colaborado con la artista Julia Lockheart en un grupo de discusión e ilustración de sueños. Se invita a un miembro de la audiencia a compartir un sueño reciente. Blagrove dirige la discusión, mientras Lockheart esboza una interpretación del sueño en las páginas del libro de Sigmund Freud La interpretación de los sueños. 
 
Su artículo de investigación de 2019 mostró que hablar de un sueño de esta manera puede conducir a una mayor empatía entre el que comparte el sueño y los oyentes. Blagrove sostiene que esto podría haber sido valioso para la supervivencia ancestral al formar conexiones significativas con otros. 
 
Otras teorías sobre por qué soñamos también han comenzado a surgir en los últimos años, y algunas se discutieron en un panel en junio de 2024 en la conferencia anual de la Asociación Internacional para el Estudio de los Sueños (IASD). Por ejemplo, la teoría de la cognición corporizada de los sueños, que propone que los sueños nos preparan para las acciones cognitivas de la vida cotidiana de vigilia. 
 
Todavía no se ha probado, pero muestra un creciente interés científico en el propósito adaptativo de los sueños. 
 
Perspectivas de series de sueños largos 

Michael Schredl, de la Universidad de Mannheim (Alemania), es posiblemente el investigador de sueños más prolífico de la actualidad, habiendo publicado cientos de artículos y libros desde que comenzó su carrera en los años 90. Lleva un diario de sueños desde principios de los años 80. En la conferencia de la IASD, dio una conferencia magistral en la que analizó más de 12.000 de sus sueños. 
 
En general, los patrones parecían apoyar la hipótesis de la continuidad de los sueños: que nuestros sueños están influenciados por los acontecimientos y las preocupaciones que suceden en nuestra vida de vigilia. 
 
Schredl cree que es una de las primeras personas en observar los patrones climáticos en los sueños. Observó una disminución constante a lo largo de los años de hielo, nieve y granizo en sus sueños. Curiosamente, esto era similar a la disminución documentada del número de “días de hielo” (días en los que la temperatura estuvo por debajo de los 0 °C durante 24 horas) en Alemania desde que lleva un diario de sueños. Bromeó que tal vez los efectos del calentamiento global también se están mostrando en los sueños, pero esto también podría estar influenciado por las preocupaciones sobre tales cosas. 
 
Otro patrón interesante fueron las referencias al dinero en los sueños. Cuando el marco alemán era la moneda predominante, aparecía ocasionalmente en sus sueños a lo largo de los años, pero cuando la moneda alemana cambió al euro en 2002, el número de referencias al marco alemán fueron reemplazadas por referencias al euro. Las 
 
series de sueños largas como esta son raras, pero pueden mostrarnos cómo el contenido de los sueños está entrelazado con nuestra vida de vigilia. 
 
Recuerdo de sueños 
 
Algunas personas son mejores que otras para recordar sus sueños, recordándolos con más frecuencia y con más detalle. Durante mucho tiempo, los investigadores han tratado de determinar las razones y los mecanismos de esta diferencia. Han analizado factores como la personalidad y la actitud hacia los sueños, la capacidad general de memoria y las pequeñas señales fisiológicas que ocurren durante ciertas etapas del sueño. Hasta ahora, uno de los predictores más consistentes de un recuerdo de sueños más frecuente ha sido una actitud positiva hacia los sueños: si crees que los sueños son importantes, probablemente estés más motivado para tratar de recordarlos con más frecuencia. 
 
En 2022, la investigadora francesa Salomé Blain y sus colegas investigaron el papel de la atención en el recuerdo de los sueños, una habilidad cognitiva que está estrechamente relacionada con la memoria. 
 
Si bien la capacidad de sus participantes para recordar los sueños no parecía estar vinculada a la memoria de trabajo (que retiene temporalmente la información para su uso inmediato), los participantes con un bajo recuerdo de los sueños eran mejores a la hora de ignorar los estímulos que los distraían, y viceversa. 
 
Compararon a los participantes con bajo y alto recuerdo de los sueños en cuanto a su capacidad para distinguir si dos melodías (que se tocaban en el mismo oído) eran diferentes, mientras que una melodía que los distraía se tocaba en el oído opuesto. 
 
Esto sugiere que las personas que son buenas recordando sueños pueden ser peores filtrando información irrelevante y distractora, por lo que pueden notar más lo que está sucediendo en su mente mientras duermen. 
 
Sin embargo, recordar los sueños es una habilidad que se puede aprender. Por ejemplo, llevar un diario de sueños puede mejorar significativamente el recuerdo de los sueños, especialmente para las personas que ya tienen un recuerdo de sueños bastante bajo.