El proyecto está diseñado para allanar el camino hacia un asentamiento humano sostenible bajo la superficie del mar.
Los fans de la serie de videojuegos Bioshock pueden estar familiarizados con Rapture, una utopía submarina ficticia que fue impresionante desde un punto de vista técnico, pero fracasó miserablemente a nivel social.
Ahora, un inversor anónimo está gastando cientos de millones para hacer realidad el sueño de un asentamiento submarino permanente y todo comienza en una cantera inundada enclavada en la campiña británica.
El proyecto, conocido como DEEP, actualmente con sede en Gloucestershire, tiene como objetivo “aumentar la comprensión del océano y su papel fundamental para la humanidad”.
En este momento, la cantera inundada se está utilizando para probar módulos submarinos habitables (conocidos como centinelas), así como los vehículos submarinos y la infraestructura necesaria para acceder a ellos y hacerlos funcionar.
El plan será sumergir varios de estos módulos en el océano en un futuro próximo para establecer un asentamiento humano sostenible en el que la gente pueda vivir, dormir, trabajar y comer.
En un principio, la gente solo podrá permanecer en ellos durante 28 días, pero el objetivo es ampliar considerablemente este período, lo que permitirá a los humanos vivir toda su vida bajo el mar.
Tal vez lo más sorprendente del proyecto sea su misterioso benefactor, un individuo que sigue siendo completamente anónimo, pero que parece dispuesto a invertir sumas de nueve cifras para hacer realidad esta particular visión lo antes posible.
¿Podría ser una figura pública muy conocida? Todo lo que podemos hacer es especular.
En la actualidad, está previsto que los sumergibles Sentinel comiencen a vivir en el océano en 2027.
Sin embargo, no está claro si el proyecto será sostenible a largo plazo.